martes, 10 de julio de 2012

VaP! es un grande!! FINISHER!

Queridos amigos triatletas!

Si, al fin se confirma. Las fotos, y sobretodo el pantallazo certifican que nuestro héroe (ahora más que nunca) VaP! ha terminado su particular hazaña.
 

Al muy cabrón le ha sobrado más de una hora ganándonos la apuesta con calidad...
Ahora sólo falta la consabida crónica, imprescindible para cerrar el círculo. Pero de eso,
desgraciadamente, no me puedo encargar yo.






VaP! es FINISHER con un tiempo de 13:55:42!!!

lunes, 9 de julio de 2012

Y el cabrón de VaP... Ganó la apuesta!!!

Si, queridos lectores, tras casi 14 horas de esfuerzo, VaP! nos cerró la boca a todos y se llevó su peluco fraude...
C'est la vie, pero las cosas pasan porque tienen que pasar.
Enhorabuena total. Muy grande!!

Llegada al lugar del crimen... Nervios!


Más nervios!!


Los aledaños del evento.. Rollo IM total..


Recogida de dorsales. VaP! Brothers y Baonix.
Gonchi haciendo el capullo.


Antes de la prueba. Noche cerrada. La cámara debía de estar cerrada también...


El pequeño de los VaP! antes de la prueba. Es un joven entrañable..


viernes, 6 de julio de 2012

Cosas que aprenderá VaP! Por VaP!

1º. Entrenar con Gonchi a muerte con frio, viento, lluvia, sol, fotillos, geles etc……he conocido mucho mejor a mi hermano, nunca se tiene demasiado tiempo para eso.
2º. Año de descojone con los colegas.
3º. Recuperar la forma física e incluso incrementarla, nunca perdida, pero abandonada J
4º. Dejar de fumar y de beber durante 7 meses lo primero y 1 año lo segundo.
5º. Ponerme una metodología de trabajo y exprimir el tiempo a muerte para que Teresa y los enanos lo notasen lo mínimo posible. Obligandome a organizarme, a madrugar, acostarme tarde y ha llevar una vida muy pero que muy ordenada……….creo que en el futuro me va a ser muy útil cuando sea CEO del Banco J.
6º. Motivar a que muchos del foro hagan deporte……..Santi hasta va a hacer un IM, brutal.

Pero sin duda, muy muy de lejos de los demás puntos y en el caso de acabarlo, lo que es totalmente “price less” es la cara de mis 17 colegas más cercanos que desconfiaron de mi cuando vean que lo acabo. El wannabe es solo para acordarme de vosotros y la apuesta cada vez que mire la hora y sonreiré………o quiza no pueda mirar la hora ni sonreir…ja ja queda poco para saberlo.

jueves, 5 de julio de 2012

Cosas que demostrará VaP! Si acaba. Por Guser

Cosas que habrá demostrado si termina:

1.       Que entrenando duro cualquiera puede acabar un Ironman
2.       Que entrenar duro no es suficiente para hacer buenos tiempos en un Ironman
3.       Que el rencor, el orgullo y la venganza, son más motivadores que la gloria y la superación personal.
4.       Que con una mujer de 9 meses y dos churumbeles se puede acabar un Ironman
5.       Que se puede entrenar un Ironman sin ropa técnica
6.       Que no se puede competir en un Ironman sin ropa técnica
7.       Que se pueden entrenar un Ironman con una bici cutre y sin conocimientos técnicos
8.       Que se puede entrenar un Ironman sin atender a consejos, solo con la ayuda de un libro
9.       Que los banqueros no están muy estresados a pesar de la crisis que han contribuido a crear
10.   Que se puede compaginar el padel con el Triatlón
11.   Que no son los donuts los que engordan, si no el deporte
12.   Que se puede conseguir un moreno uniforme entrenando Triatlón
13.   Que el casco no es necesario
14.   Que es posible perder velocidad media en bici después de 500h respecto al primer día
15.   Que se puede ganar dinero siendo el último
16.   Que se puede ganar más dinero que el primero siendo el último
17.   Que tener amigos ingenuos es muy lucrativo
18.   Que la Rodius, la ropa de Fumarel y los Bulgary, son horteras

miércoles, 4 de julio de 2012

Consejos de Kikín para VaP!

Te queda una semana para volver a fumar, beber.... Y un largo etc. En resumen, te queda una semana para volver a hacer lo que quieras y no tener obligaciones deportivas. Si lo terminas, cosa que espero, piensa que solo habras demostrado una cosa: que la unica forma de terminar un ironman es entrenado un huevo. Has entrenado muchas, pero muchas mas horas de las hemos entrenado nosotros, y eso merece un reconocimiento, que por mi parte lo tienes, pero te ha costado cerca de 550 horas de todo un ano y eso que aun ni siquiera te has presentado en la salida y por lo tanto lo unico que has demostrado es que le has echado horas. Si no cruzas la meta, habras tirado por la borda 550horas y una pasta, ademas de que nos mofaremos de ti durante muchas mas horas de lo has entrenado. Si cruzas la meta, lo unico que habras demostrado es que un ironman lo puede correr cualquiera, y que como todo requiere esfuerzo y dedicacion. Todos podemos hacer lo que queramos, solo necesitamos querer hacerlo de verdad y dedicarle tiempo. 

martes, 3 de julio de 2012

Consejos de Crissie by TriMonkey

Estos son los 10 tip for performance de Crissie (yo hago caso FUNDAMENTALMENTE al último). Joder, es que valen para el deporte, la familia, los negocios…. Esta mujer es la polla:

Performance tip #1: Passion gets you further than gear.
Performance tip #2: More isn't always better.
Peformance tip #3: Don't be afraid to go fast.
Performance tip #4: Rest is as important as training.
Performance tip #5: Train your mind, too.
Performance tip #6: Have a mantra (or two).
Performance tip #7: Make it hurt.
Performance tip #8: Develop a deep understanding of your own body.
Performance tip #9: Get stronger by getting smarter.
Performance tip #10: Eat!

lunes, 2 de julio de 2012

Cosas que habrá demostrado VaP! By Guser

Cosas que habrá demostrado VaP! Si termina. Queda una semana!

1.       Que entrenando duro cualquiera puede acabar un Ironman
2.       Que entrenar duro no es suficiente para hacer buenos tiempos en un Ironman
3.       Que el rencor, el orgullo y la venganza, son más motivadores que la gloria y la superación personal.
4.       Que con una mujer de 9 meses y dos churumbeles se puede acabar un Ironman
5.       Que se puede entrenar un Ironman sin ropa técnica
6.       Que no se puede competir en un Ironman sin ropa técnica
7.       Que se pueden entrenar un Ironman con una bici cutre y sin conocimientos técnicos
8.       Que se puede entrenar un Ironman sin atender a consejos, solo con la ayuda de un libro
9.       Que los banqueros no están muy estresados a pesar de la crisis que han contribuido a crear
10.   Que se puede compaginar el padel con el Triatlón
11.   Que no son los donuts los que engordan, si no el deporte
12.   Que se puede conseguir un moreno uniforme entrenando Triatlón
13.   Que el casco no es necesario
14.   Que es posible perder velocidad media en bici después de 500h respecto al primer día
15.   Que se puede ganar dinero siendo el último
16.   Que se puede ganar más dinero que el primero siendo el último
17.   Que tener amigos ingenuos es muy lucrativo
18.   Que la Rodius, la ropa de Fumarel y los Bulgary, son horteras


martes, 5 de junio de 2012

IM Techniques...

Para mi, y creo que hablo en nombre de todos, VaP! es un bocachancla y quiero y deseo que haya dolor. Eso si, estoy empezando a estar un poco acojonado con que vaya y lo termine. OMG... Pero such is life, sigo viendo dolor pero aquí van algunos tips! Todos con VaP!?

viernes, 18 de mayo de 2012

Las crónicas de Guser: Alcudia 2ª parte

Sufrimiento. Mucho sufrimiento es lo que hemos compartido en Alcudia este año…

El viernes se antojaba muy bonito todo. Salimos a rodar y las medias eran altas sin apenas esfuerzo en comparación con nuestra ruta habitual por el carril. Fuimos a nadar y la temperatura era perfecta, el mar como un plato y el recorrido completamente recto y sencillo. Solo asustaba el calor que hacía fuera para la carrera y quizás un poco el monstruo que lleva Pablete entre las piernas cuando va con Cullotte.
Como ya comprobamos el año pasado, mucho alemán de 3 metros, mucho tatuaje, famosetes, una cantidad ingente de bicis de más de 12.000€ (Shiv, P5, Trinity…. Con Lenticulares Lightweight, Zipp….) y sobretodo, poco pelo en las piernas… Así que el Team Im-In, al menos en este sentido estaba fuera de lugar.

Luis, Kike y yo, intentamos dar todos los consejos previos que nos hubiera gustado recibir en nuestro primer triatlón, ya que la logística que rodea a un evento de estos, es mucho más compleja de lo que pudiera parecer desde fuera. Azqueta nos lo agradece a su vez dándonos consejos sobre como triunfar en Vadoo y el mundo de las redes sociales orientadas a solteros.

El sábado por la mañana, todos juntos de nuevo realizamos las últimas gestiones y compartimos los últimos momentos de nervios. Contrastaban los lógicos temores de los tres novatos ante la perspectiva de enfrentarse a lo desconocido, con la pereza y el cuestionamiento del “por qué estamos aquí de nuevo” de los que repetíamos y no teníamos realmente objetivos realmente motivadores.

El día era una incógnita. Se daba la casualidad de que los 3 nuevos salían 10 minutos antes. Así que en función de cómo nadaran, podíamos llegar a adelantarles nadando, en la transición, o en los primeros km de la bici. Ellos tendrían una referencia de su situación respecto a los otros y además tendríamos ocasión de compartir carrera todos. Por otro lado, sabíamos que Luis saldría algo antes del agua y no le veríamos el pelo. En cambio, Kike y yo estábamos destinados a compartir carrera, o al menos hasta los descensos donde mi bloqueo mental me frenaría sin remedio, hasta el punto que volvería a ser rebasado al menos por Diego.

A las 8.30 salieron Diego, Pablo y Azqueta. Seguramente Azqueta saldría algo más tarde, pero eso es otra historia… 10 minutos después, estábamos los tres en primera fila. En ese momento ya se te olvidan todos los pensamientos previos y te centras en darlo todo. Gracias a salir por olas, no hay excesivos manotazos y se puede hacer una natación limpia. Al llegar a la segunda bolla, ya estamos cogiendo a los “gorros dorados” y me voy fijando por si me cruzo con alguno de estos. Me parece cruzarme con Azqueta, aunque no le puedo saludar.
Tengo la sensación de haber nadado fuerte y bien. Pero cuando salgo del agua, mi tiempo es casi tres minutos peor que el año pasado. No me cuadra… (Nos ocurrió a todos, incluidos pros).
En la transición me encuentro con Pablo, que ha salido segundo de los tres. Salgo en la bici y empiezo a rodar sin forzar demasiado, para hidratarme y comer, que se me da fatal…
Justo cuando llevábamos unos 2km de puerto, es decir, en el km 22-25, Kike me da alcance y ya el panorama cambia por completo. Podemos hablar y olvidarnos del sufrimiento. Subimos muy fuerte, adelantando muchísima gente. A mí me viene bien, porque probablemente de no estar Kike hubiera sido algo más conservador y así no me duermo. No me cuesta seguir su ritmo y estoy encantado con la idea de no hacer sólo la carrera.
Nos cruzamos al poco con Diego, que pensaba que se estaba enfrentando al final del largo puerto, cuando en realidad le quedaba los kilómetros más duros. Le preocupa Azqueta, pero realmente el que tiene más cerca es Pablo, que no debe andar muy lejos.

Llegamos a lo alto del puerto y se que en ese momento llegará el bloqueo mental y la razón por la que no iba a ir a Mallorca. Empezaban los descensos y en concreto la parte que más me aterra, que es la que tiene un cortado vertical a la izquierda que me paraliza por completo. Nos deseamos suerte y seguimos… Pero cual es mi sorpresa, cuando veo que mi habitual bloqueo no acaba de llegar. No toco las manetas de los frenos. No solo estoy relajado, si no que estoy pedaleando fuerte y adelantando mucha gente… ¿Qué pasa? No lo entiendo, pero no me he despegado ni un metro de Kike, que no es un temerario bajando, pero tampoco baja despacio.
Llegamos a la parte de las curvas de herradura. Se que desde aquí son 8km de curvas muy peligrosas y aunque llevo una sonrisa de oreja a oreja conformándome con haber llegado hasta aquí, se que ahora me toca frenar…. Pues no. Seguimos adelantando gente y si no vamos más rápido es porque hay muchas bicis paradas en cada curva (por accidente, o avería) y siempre hay dos o tres bicis de gente que va más despacio y hay que ser cauteloso al adelantarlos.
Llegamos a la falda de la montaña y empezamos todo el camino de vuelta. Muchos kilómetros, falsos llanos, bucles, alguna rampa corta muy dura, pero prácticamente 45 km para ir acoplados.
Tras unos cuantos minutos viendo que íbamos SUBIENDO a 55km/h, me acerco a Kike al que siempre seguía por detrás, ya que el iba con cabra y llantas de perfil de 90mm con lo que no me veía con capacidad de marcar yo el ritmo. Le digo que mire el reloj y está flipando como yo… Realmente si no fuera por el puerto, que es duro, hubiéramos marcado una media de infarto.
Nos cruzamos en el bucle con Luis. Para nuestra sorpresa está MUY cerca! No sabemos si porque hemos ido muy fuerte, o por avería. Luego supimos que tuvo un reventón, así que probablemente las dos cosas influyeran.
El final como siempre se va haciendo pesado… Nunca llega y tanto las piernas como la cabeza, tienen pocas ganas de seguir. Aunque pensar en correr, es casi peor…
Antes de llegar, me comprometo a esperarle en la transición y hacer la carrera juntos. Sabemos que tenemos ritmos parejos y ya que no tenemos especial motivación por esta carrera, al menos compartiremos el sufrimiento de los siguientes 21 agónicos kilómetros.

Empezamos a correr y quizás marco yo el ritmo inicial. Yo suelo salir fuerte y en cambio Kike suele ser capaz de mantener el mismo ritmo de principio a fin. Empezamos a 4:20-4:30 y al cabo de 4 ó 5 km el ritmo ya va cayendo irremediablemente a 4:50-5. Estamos los dos machacados y con pocas ganas… Hacemos pacto de no agresión, por si las moscas! Entraremos en meta de la manita. Nos lo merecemos…
Me temo que yo no estaba preparado para lo que me sucedió a continuación. Seguramente porque  había perdido las pastillas de sales, el calor extenuante, el casco aerodinámico que es una cazuela etc… Me llevó a deshidratarme por completo. Pasé de estar simplemente machacado, algo a lo que estoy acostumbrado y se controlar, a tener un mareo brutal, similar al de las pájaras, pero acompañado de tirones en todos los músculos y una necesidad insaciable de beber.

Me planteo seguir, ya que realmente lo que me motiva de estas pruebas es superar esos momentos, no hacer mejor, ni peor tiempo. Pero no quiero tener un susto y no me va la vida en ello. Solo me da pena no entrar con Kike en meta. Me hubiera gustado… Pero aun así, ni se me pasa por la cabeza abandonar. Haré el resto andando y se acabó.
En el siguiente avituallamiento de despido de Kike, que está preocupado por mí y se ofrece a pararse. Pero se que estoy controlado y que si me desmayo me atenderán. Me echo litros de agua por la cabeza, espalda, piernas… Bebo varios vasos de Coca Cola, otros de sales. Me meto varios geles y me pondo a andar.
Mis pensamientos pasan por intentar llegar hasta el pueblo y si veo que estoy poniendo realmente en riesgo mi integridad quedarme. Si no, hidratarme más y seguir.
Se me hizo interminable… Andando dando tumbos, con la vista nublada y desorientado. Cuando por fin llego al pueblo me paro… y veo algo que me da un poco de ánimo. En el avituallamiento tienen bebida energética Power Horse, que ya de por si es asquerosa, pero es que además está ardiendo. Me tomo 5 vasos del tirón, más Coca cola, gel, plátano y naranja. Sigo andando y al poco decido intentar trotar. Troto 50 metros y los tirones son brutales. Son generalizados. Pero no quiero rendirme. Ya no tengo la vista nublada. Empiezo a trotar un rato, y andar otro rato x2. Al cabo de un rato, ya soy capaz de mantener un ritmo lamentable, de 6.30. pero constante entre avituallamientos donde me paro a repetir la operación de hidratación.

Ya estoy llegando a meta y una vez más me refuerza la idea de vencer a estas situaciones solo con la cabeza. Me encuentro con Pablo. Está fatal… Pero está demostrando un pundonor impresionante. Trota un poco conmigo y me despido, que ya llego y se queda con su calvario personal. Otra vuelta por ese infierno.

Llego a meta, dedico mi dorsal a Guillermo Barth y me encuentro con Luis y Kike. Momento de compartir anécdotas.

Después supimos que Azqueta nos vio pasar a todos en el agua, que tuvo un accidente a pesar de lo cual hizo buena carrera. Pablo finalizó con éxito, aunque en un estado lamentable (lo que permite disfrutarlo aun más…), Kike consiguió mantenerse hasta el final y Luis también. Ninguno hizo tiempos estratosféricos, pero todos terminamos un medio Ironman, que además por su temperatura y por el desnivel de la montaña, es bastante duro.
 
ANTES:


DESPUÉS:



jueves, 17 de mayo de 2012

Las Crónicas de Guser: Alcudia 1ª parte

 Este fin de semana el equipo IM-In ha estado en Alcudia, Bilbao y VaP se ha hecho su particular freaky medio Ironman en las inmediaciones de la Moraleja. Por ahora únicamente tenemos crónica de Mallorca.
*(Artículo extraido del correo enviado por Guser el lunes).

Este fin de semana ha dado para mucho. Los de Bilbao nos tienen que contar como les fue.

Aunque sigo confiando en Juanino, solamente doblando los tiempos que ha hecho en su medio simulado, le dejarían realmente poco margen: 1:30 de natación + 7.40 bici + 4.28 carrera + Transiciones (pongamos 12 minutos) = 13:50 minutos.

Es un tiempo razonable. Pero si peta en la carrera, tiene alguna avería mecánica, no es capaz de mantener el mismo ritmo el doble de tiempo, o le perjudica demasiado el desnivel de Frankfurt (1000m) y el hecho de que sean 185 y no 180km pueden llevar al límite esas 15h.

Sobre Alcudia, os envío una comparativa de tiempos. No aparece Diego en las clasificaciones.

Pablo le ganó el segmento de natación y de bici a Azqueta con una diferencia importante (No olvidando que Azqueta tuvo accidente) y en cambio le recortó la distancia en la carrera hasta el punto de quedar a 3 minutos! Hubiera sido una batalla final cachonda.

Los demás, aunque ya os lo comenté ayer: Luis, doble reventón y cuasi accidente descendiendo Lluch. Kike y yo carrera cojonuda porque la hicimos juntos, hasta que me dio una deshidratación a mitad de carrera que pensaba que me iba al hospital directo… Habíamos hecho pacto de no agresión y nos íbamos apoyando. Hubiera sido bonito, pero no pudo ser… Así que hice 7km andando e hidratándome y el final trotando a 6:30, incluso un rato con Pablito.
Pablo y Diego sin percances y como toca, sufriendo como perros.

Por mi parte feliz, porque hice el descenso con Kike adelantando a un huevo de gente. Buenas sensaciones nadando y la parte de la carrera, me ha enseñando a tenerle respeto a esto…


lunes, 23 de abril de 2012

"The TRIlogy. Part II… During the IM" por Guser

Siento la extension, cuasi equiparable al IM, pero como las buenas series, me veo obligado a extenderlo sin sentido en una segunda entrega no contemplada inicialmente para dilapidar el éxito de la primera.

Angustia. La primera sensación es de angustia. Acabo de lanzarme al agua como si se tratara de una competición de 100m y mi máxima preocupación es no ser arrollado por la ingente masa de atunes que me preceden. Trato de buscar casi desesperadamente una buena posición, pero los brazos apenas alcanzan agua y siempre se topan con algún neopreno, gorro, piernas, etc… Trato de no entorpecer, de no hacer daño a nadie y en cambio no dejo de recibir talonazos, codazos, gente que me pasa literalmente por encima, e incluso en direcciones diferentes ¿?. Me preocupa que un golpe fuerte en la cara me deje fuera de la competición tan pronto y solo deseo que pase esa fase inicial para nadar más cómodo. Quizás todos tengan la misma buena voluntad, pero me cuesta creer que aquel que me acaba de agarrar de la pierna, ese que me ha dado 7 manotazos seguidos, o el de más allá al que irremediablemente me he acercado y ha intensificado las patadas teniendo mi cara debajo, guarde buenas intenciones.

Pero en el Ironman rara vez encuentras agua limpia y soy consciente porque lo he vivido antes. En algún tramo me encuentro más cómodo y consigo nadar, pero generalmente resulta complicado seguir los pies de alguien y adecuarte a su ritmo, que sería lo óptimo. Cada vez que llego a una boya, la situación vuelve a ser crítica y se repiten las montoneras iniciales incluso llegando a pararte, por no mencionar los litros de agua que ingieres. Por todo ello, realmente no se llega a disfrutar demasiado de la natación. 

A medida que vas avanzando y los cálculos mentales te dictan que el final está próximo, empiezas a notar la fatiga en los hombros, las molestias en el cuello…. Ya empiezo a estar harto. Quiero que empiece la parte que marcará mi Ironman, la bici. No tengo ninguna información de tiempos y no alcanzo a ver mi reloj, que realmente me aportaría poco. ¿Estaré haciendo un buen tiempo? Imposible saberlo… Me he desviado trescientas veces, con seguridad he perdido mucho tiempo haciendo eses para esquivar gente y he pasado un tiempo importante tratando salir de la red de atunes. Pero sobretodo, sin la información a la que estamos acostumbrados de pulsaciones en relación al esfuerzo, gps y demás, no puedo hacerme una idea de si me he acomodado, he forzado, o que narices he hecho.

Ya veo el final… dicen que es bueno dar patada en los últimos 50m para reactivar las piernas y que circule la sangre. Aprieto un poco y ya antes de salir del agua, he olvidado la “angustia” vivida y estoy pensando en la transición.

Es curioso, no siento nada extraño, pero en cuanto voy a salir del agua noto mareo y desorientación. No me importa y no voy a dedicarle un segundo a esta nimiedad. El tiempo según lo esperado. Bien hecho, ya me he quitado un tercio de la prueba y eso mentalmente es importante. Salgo corriendo y todos me entorpecen. Entiendo que el Ironman es muy largo, pero también es una competición y yo no me sentiría cómodo andando pudiendo correr. Ya andaré en el maratón si no queda más remedio! Busco la cara de Sandra, cuyo aporte anímico será mayor que el de cualquier barrita.

Empiezan los nervios… No encuentro la bolsa, me paso la bici, me pongo todo en desorden. Pienso que debería haber sido más ordenado y cuidadoso, pero lo cierto es que todo estaba donde debía estar y son los nervios los que me están traicionando.
Empiezo a montar… Tengo frío y se que me espera un calvario, pero ahora estoy contento. Empieza el Ironman de verdad y aunque luego estaré machacado, voy a por todas. No me olvido de beber y alimentarme pasados unos km. No puedo olvidar que llevo una hora de natación embutido en un neopreno y eso consume muchos líquidos y energías.
Dedico los primeros pensamientos a mis amigos. Luis suele hacer tiempazos en natación y en la bici va muy fuerte también, ¿Intento forzar para cogerle y hacer la carrera juntos? No sería una buena idea… Haz tu carrera y olvídate. ¿Y Kike? Siempre estamos en un margen de uno, dos minutos en natación, así que tenemos que estar al lado. Me planteo aflojar y dejar que me de alcance, puesto que se por Sandra que delante no está. Podría ser una buena idea si realmente está a un minuto, pero es una incógnita. Va bien en bici y también tiene la información de Sandra, de modo que confío en que él apriete un poco y nos veamos. 180km juntos sería muy bueno… No sólo porque sería mucho más ameno y porque compartir el reto es bonito, si no porque la suma de los dos, aun sin drafting, es superior a la participación individual.

Van pasando los km y no nos encontramos. Dejo de pensar en ello. Ya me dará alcance en alguna subida donde el pelotón se agrupe y me vea, o en algún descenso donde con seguridad será más rápido por mis temores enfermizos al desnivel negativo.
Durante la bici tienes tiempo para pensar en muchas cosas. Casi todo el tiempo lo dedicas a hacer cálculos mentales sobre tiempos y ritmos, recordar el perfil de la prueba para ubicarte y sobretodo, a racionalizar comidas y bebidas.

Salvando los puertos, rara vez me encuentro con pelotones. Veo grupos haciendo drafting y en cierta manera me molesta. Más que nada por incomprensión. Que haya gente que a mi nivel, que se olvide que esto es una competición contra ti mismo me resulta chocante. Allá ellos…
Van pasando los kilómetros y me acuerdo de los madrugones de los sábados y de la intensidad cuasi insana de nuestras salidas para llegar pronto a casa y suplir la carencia de tiempo con la intensidad. Veo que los kilómetros hacen mella en mis piernas y solo de pensar en un maratón me entran escalofríos, pero sigo viendo a mi alrededor a las mismas personas de las últimas 3 horas, así que no debo ir mal. No fuerzo nunca, aprovecho los descensos para dejar de pedalear y trato de no forzar más de lo debido en las subidas que cada vez cuestan más. Noto la rueda de atrás frenada y si me levanto se frena del todo, pero en ese momento desacertadamente decido seguir así y centrarme en no superar el umbral de 145 pulsaciones. Pero las cuestas que normalmente no me costarían, me están matando. Mi capacidad de raciocinio es limitada, o al menos es a la conclusión a la que llegué después. Evitar la rueda frenada hubiera llevado 15 segundos a lo sumo y nunca sabré que implicaciones tuvo esta “avería” a nivel de fatiga.

Pero esto ya está hecho. El miedo a tener algún susto mecánico está ahí, pero ya no me preocupa acabar la bici, si no como voy a ser capaz de correr un maratón entero con las piernas vacías. No es necesariamente malo, porque a 30km del final ya casi das por finiquitada esta sección. Como he hecho durante el resto de la carrera, animo a los animadores. Animo a los corredores que se ponen a mi lado y eso me anima a mí.

En la primera vuelta me encontré con Sandra desgañitándose a gritos. Sentirse acompañado y apoyado te da algo mejor que alas, porque las alas pueden quebrarse. Te da la convicción y la garantía de que pase lo que pase, acabarás. No puedes decepcionarle.
Llegamos al km 180 y me quito un peso de encima tremendo. Esto está prácticamente hecho y aunque sea una idea un tanto ridícula porque lo que te queda por delante es la verdadera travesía del desierto del Ironman, al depender exclusivamente de ti mismo y no de factores técnicos, o ambientales, te da muchísima seguridad y en ese momento sonríes. Voy a por ti.
Pierdo la sonrisa tan rápido como había llegado. Me bajo de la bici y siento un dolor muy intenso. Tan solo puedo cojear. En la bici no lo había notado, pero mi lesión crónica en la cresta ilíaca me está pasando factura.

Tengo la sensación de tener las piernas absolutamente vacías y solo plantearme correr más de 5km me parece una locura, pero de momento me preocupa más el intenso dolor. Aquí es donde realmente aparece el “Ironman”. No es solo una cuestión de estar preparado físicamente, si no de ser capaz de superar los pensamientos negativos que son muchos y los dolores físicos, que son incontables.

Voy a seguir adelante. Decido meter los pensamientos negativos, junto a los dolores ahora de rodillas, de cadera y de tripa, en una caja que almacenaré en alguna parte del cerebro alejada de las funciones vitales. Ahora no tengo que echar mano de otra cosa que no sea mantener ese movimiento repetitivo durante 42km, respirar y poco más. Parece mentira pero funciona. Soy consciente de que el dolor está ahí, pero ya no es algo que me preocupe. No va conmigo. Tampoco el mensaje repetitivo que me incita a parar, que ahora apenas es un zumbido lejano. Correr, correr, correr… Soy un autómata con capacidad de procesamiento limitada. Tan solo me permito el lujo de aminorar hasta andar en los avituallamientos, porque realmente el cuerpo me pide cocacola, me pide geles, plátanos y naranjas. Si me como eso corriendo, perdería la capacidad de respirar y habíamos quedado en que solo tenía dos (correr y respirar).  
Las pequeñas metas son importantes. Además de dar un paso más, que no es poco, me centro en llegar a cada avituallamiento. Están relativamente cerca, pero llegar a cada uno parece un mundo. Vaya tortura… No entiendo como otros dicen que disfrutan de esto. Yo disfruto con la idea de enfrentarme al reto y superarlo. Es cierto que en algunos momentos te sientes bien y disfrutas de lo que se ha convertido no solo en tu afición, si no prácticamente tu única actividad extralaboral. Pero lo único que quieres es acabar de una vez… Miras tu reloj y haces tus cálculos. La cabeza no funciona muy bien y tan solo alcanzo a hacerme una idea de los tiempos que puedo hacer en base a ese ritmo y si puedo apretar, o aflojar.

Veo a Sandra cada vuelta y me anima, aunque esta vez los ánimos y la sonrisa fingida apenas alcanzan a aflorar en mi cara. Me cruzo con Luis, que lleva cara de estar disfrutando aun menos que yo. Demasiado lejos para intentar darle alcance y no me veo con ganas de forzar más el ritmo y sufrir más de la cuenta, cuando he marcado un objetivo ya ambicioso. Veo a Kike y también está lejos, o al menos lo suficientemente lejos como para no motivarme a forzar para evitar ser cogido. Con lo cual me relajo y me conformo con terminar en 10:30 que era el objetivo que alcanzaría al actual ritmo de autómata. Me planteo forzar en algún momento, pero no solo estoy para el arrastre, si no que no le encuentro sentido alguno a acabar destrozado para rebajar una cifra redonda. Lejos quedan las 10h.

Cuando quedan 12km doy la carrera por terminada. Se que ya está hecho. De nuevo puede ser absurdo pensar de esta forma, pero se que puedo mantenerme así otros 12km y que es poco probable que me ocurra nada (al menos lo pienso). No siento ilusión, ni alegría… Solo ganas de acabar ya. Nunca más volveré. Nunca más volveré. Esto es absurdo… No se si lo hago para demostrarme a mi mismo algo, para demostrar al resto, si es todo fachada, pero tengo claro que cualquier razón, es insuficiente para estar aquí haciendo esto que es claramente poco saludable, que no disfruto  y que supone tantos sacrificios para mí y para mi familia en todos los sentidos (tiempo, dinero, discusiones, etc…).

Últimos 200m. Sandra me espera ilusionadísima después de llevar 10h esperando este momento y haberse pegado el madrugón igualmente. Esto se lo debo a ella. Entramos en meta, en megafonía se oye “Gustavo… YOU ARE AN IRONMAN” y la descarga es total… No hablo de alegría, hablo de lo que debe sentir un monje cuando alcanza el estado de plenitud. Un estado zen. Hablo del camino del Samurai, cuando alcanza el grado de sabiduría que le otorga una serenidad inmesurable. De Santa Teresa de Jesús al llegar al éxtasi. De Nadal tras ganar una final de Gran slam de 5 horas. De Contador al ganar un Tour, de U2 tocando en Wembley, de… Bueno, creo que lo habréis captado. Lo has conseguido. No te queda una gota de energía en el cuerpo (de hecho no te queda hace horas), pero todas aquellas presiones, todos esos nervios de desvanecen. He vencido de nuevo al coloso. No eres nadie en comparación conmigo y eres tú quien debe temerme.

(End of part II) 

viernes, 20 de abril de 2012

"Sensations PreIM& Pre1/2IM" por Guser

Son las 4 de la mañana. No he necesitado esperar a que suene el despertador para estar en pié, lo cual es un claro indicativo de que mi aparente tranquilidad, es pura fachada.
Empiezo a ser relativamente consciente de que ha llegado el momento. Para mí es un día importante. Quizás desde fuera parezca una banalidad, pero yo he depositado muchas ilusiones e invertido muchas horas para fracasar ahora. Fracaso… ¿Qué sería para mí un fracaso? Para mí fracasar sería no haber llegado aquí, o no terminar si no es por causa mayor. Pero lo cierto es que esto no es un reto individual. Familia, amigos, conocidos… Muchos están al corriente y te acompañan en cierta medida. Todos ellos esperan que hagas algo grande, que mejores tus tiempos, que ganes a tus amigos, o tener una anécdota que contar a terceros.
Todo ello, contribuye a incrementar la presión y buscas en tu interior por esa sensación de fortaleza que por alguna razón consideras que debes sentir antes de enfrentarte a un reto físico tan importante. Pero no hay nada. No te sientes fuerte, ni flojo, solo una sensación extraña que te esfuerzas por canalizar de forma positiva.

Te disfrazas de triatleta, revisas lo revisado 100 veces antes y vuelves a revisar, con la sensación de que algo te estás dejando (y probablemente sea así…). Desayunas lo que consideras conveniente, también con dudas… es la única comida del día, ¿Estaré comiendo lo adecuado? ¿Será poco, mucho? Bebes y vuelves a beber. Son solo las 5 de la mañana pero tienes que quedar con tus amigos, e ir a la zona de boxes a preparar y revisar el material.
Hay que pasar por el baño. No es opcional, o voy ahora, o luego será un problema. Llevo pasta en la tripa de una semana y ahora un abundante desayuno… No hay forma y esto implica necesariamente pasar posteriormente por esa cabina de plástico que acumula las desgracias de otros 2000 triatletas con la misma incapacidad. Que sea como tenga que ser, pero no quiero más elementos que temer en la carrera.

Caminas hacia boxes. Literalmente miles de triatletas enfundados en sus trajes de neopreno transitan por las calles. Aun es noche prácticamente cerrada y la imagen es realmente curiosa. Gestos serios, que esconden los mismos temores y ambiciones que tú. Por alguna razón en ese momento consideras que seguramente eres el menos entrenado y con menos posibilidades, aunque tus tiempos digan lo contrario.

De nuevo nervios al encontrarte con la bici. Por favor que no haya problemas técnicos… Por Dios que no pinche… Que no se me rompa la válvula ahora… Aquí los nervios llegan a su momento álgido, porque ya no queda nada. En cualquier momento van a llamar para salir de boxes.
Te centras en recordar donde está tu bici para encontrarla después con facilidad y colocar las bolsas de la transición en algún punto donde sea difícil que se caigan. Pero tus esfuerzos son en vano. Apenas recuerdas tu nombre, como para pensar en localizar una bolsa entre 2500.
Por fin llegas a la playa, en mi caso con mis dos compañeros y amigos Luis y Kike. Compartimos los últimos comentarios de aliento y dudas acerca de la mejor posición para salir. Mis pulsaciones en reposo son de 38 y ahora están en 90. Imposible apreciar en otro escenario tanto nervio contenido bajo rictus serios que se presupone debemos mostrar los hombres de hierro. Pero ahora ya si, por fin, esos nervios comienzan a convertirse en energía positiva y si bien sigues teniendo esa misma sensación de incertidumbre, es mayor la determinación y las ganas de disfrutar de este, tu momento. Un momento que independientemente de lo que signifique para los demás, para ti implica redefinirte como persona. Si puedo con esto, podré con cualquier cosa.

PUMMM!